16 diciembre 2007

Se muere un represor...

…y se lleva sus secretos a la tumba. ¿Será que amenazó con prender el ventilador? ¡Pobres abuelas que todavía tienen que encontrar a más de 400! A sus queridos nietos que han buscado desesperadamente.

¿A estos tipos es que los obispos dicen que la sociedad debería perdonarlos? Se olvidaron del catecismo, que hablaba del propósito de enmienda. Aunque se los perdone en la confesión, es ad-referendum de que verdaderamente exista el arrepentimiento y la reparación. Se supone que dios ve en sus corazones. Y ojito porque el diablo los espera para torturarlos por siempre jamás. Por lo menos el papa dijo bien clarito que el infierno verdaderamente existe. Y del infierno no se sale como cree nuestro ex -president. El infierno es eterno, y el purgatorio está en otro circuito.

Una justicia un poco primitiva pero nosotros no podemos cambiarla- si no podemos ni arreglar este mundo, menos aquel. Así que les va a tocar comer de su propia comida, en ese orden occidental y cristiano que tanto han defendido.